No hay un adjetivo que pueda calificar lo que este jueves 22 de Mayo hizo el colombiano Rigoberto Urán en el Giro de Italia. Los términos sensacional, histórico, hazaña y otros más se quedan cortos con el impresionante resultado y la descomunal actuación del pedalista nacional. No solo ganó la etapa contrarreloj de 42 kilómetros, sino que se enfundó la camiseta rosada de líder del Giro de Italia, algo que ningún colombiano había logrado en la grande historia de la carrera.

Sí, aún se goza la tremenda actuación. Siguen vivas esas imágenes de Urán negociando cada curva en el descenso, pedaleando duro en el ascenso y parándose en los pedales para aumentar la cadencia de pedaleo y sacar más tiempo. Y tampoco será fácil olvidar verlo con la camiseta rosada de líder y saludando en el podio al público que se emocionó allí con su presencia.

Su histórico resultado se ha conseguido en un marco muy especial: el pueblo de Barolo, icono mundial del mejor vino italiano, junto con el toscano Brunello di Montalcino

El hecho de que la uva Nebbiolo madura a finales de octubre hizo que las temperaturas serían constantemente cayendo por la cosecha. Por noviembre y diciembre, las temperaturas en la región de Piamonte serían lo suficientemente frío para detener la fermentación, dejando una cantidad significativa de azúcar residual que queda en el vino. En el siglo de mid-19th, Camillo Benso, conte di Cavour, el alcalde de Grinzane Cavour invitó al enólogo francés Louis Oudart a la región Barolo para mejorar las técnicas de elaboración de los productores locales. Utilizando técnicas centradas en la mejora de la higiene de la bodega, Oudart fue capaz de fermentar la Nebbiolo debe secar por completo, por lo que el primer moderno Barolo. Este nuevo vino tinto «seco» pronto se convirtió en un favorito entre la nobleza de Turín y de la gobernante Casa de Saboya, dando lugar a la descripción popular de Barolo como «el vino de los reyes, el rey de los vinos».

A mediados del siglo 20, la producción de vino en la zona de Barolo fue dominado por grandes negociantes que han comprado uvas y vinos de toda la zona y se mezclan en un estilo de la casa. En la década de 1960, los propietarios individuales comenzaron raíces embotellado y elaboración de vinos de viñedos únicos de sus tenencias. Por la década de 1980, una amplia gama de embotellados viñedo solo estaban disponibles, lo que llevó a una discusión entre los productores de la región acerca de la posibilidad de desarrollar una clasificación de los viñedos de la zona. La catalogación de los viñedos del Barolo tiene una larga historia que se remonta al siglo 19. Sin embargo, en 1980 la región en su conjunto ha sido elevado a la categoría DOCG. Junto con Barbaresco y Brunello di Montalcino, Barolo fue una de las primeras regiones vinícolas italianas para lograr esta designación.

Volvemos a nuestro campeón Colombiano … os aseguramos que ayer por la noche estuvo brindando con nuestro MARVENGA

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